En 1944 publica El diario de Hamlet García, una de las novelas más estremece doras sobre la guerra civil, que vio la luz en España recién en 1987 (editorial Antrophos) y luego reeditada en 1988, por Círculo de Lectores, y en 2001, por Visor/ Comunidad de Madrid. Del resto de su obra, todos cuentos, El hombre que hizo un milagro, De quince me llevo una, El emplazado, Historias de amor, El escándalo, Las aventuras de Marta Abril, no existen más ediciones que las que en su momento se hicieron en México en el decenio de los cincuenta. Mejor suerte corrió La trampa (México, 1954) que hoy nos ofrece la editorial sevillana Renacimiento. Está compuesta por cuatro relatos cortos: “La trampa”, “El hombre que perdió los bolsillos”, “Un ladrón” y “El gafe o la necesidad de un responsable”, todos ambientados en la España de la preguerra y con un estilo humorístico digno de destacar. Los personajes son un viejo verde que se quiere casar con una joven, un opositor a notaría fracasado, un individuo que se hace ratero para superar su miedo al robo y un grupo de náufragos cuya noticia llega al lector mediante la ficción de un manuscrito. Nada hay de irrealidad en ellos, son perfectamente verosímiles como las criaturas del más acentuado realismo. Leer esta joyita literaria, que carece del apoyo de la mercadotecnia y está dirigida al lector exigente, es pagar esa deuda de olvido con este autor brillante. No está de más anotar que el destierro bloqueó emocionalmente a Masip y para sobrevivir se convirtió en un prolífico guionista cinematográfico.