Uno de los enigmas más famosos de la literatura española, la autoría del Lazarillo de Tormes, parece haber sido resuelto. La profesora Rosa Navarro Durán, una de las mayores especialistas en literatura del Renacimiento, arriesga una tesis sumamente interesante en la que atribuye la obra a un humanista de la primera mitad del siglo XVI: Alfonso de Valdés (Alfonso de Valdés, autor del “Lazarillo de Tormes”, editorial Gredos, Madrid, 2003). El presunto autor era el secretario de cartas latinas de Carlos V, introductor del pensamiento de Erasmo en España y autor de dos de los mejores diálogos renacentistas: Diálogo de las cosas ocurridas en Roma y Diálogo de Mercurio y Carón. Sin despreciar los hallazgos de otros estudiosos del texto, Navarro ratifica el trasfondo erasmista del Lazarillo, que se revela en el tono satírico con que son tratados los estamentos sociales, con mayor saña el eclesiástico, y el origen converso del autor. Introduce una innovación fechando la obra veinte años antes de su publicación (entre 1529 y 1532). De todas estas afirmaciones no existe prueba documental alguna. Las conclusiones surgen del minucioso análisis literario que realiza la autora. Por ejemplo, la serie de personajes-amos que aparecen innominados de la misma forma que lo hacen las ánimas del Mercurio y Carón y la aplicación del método de las concordancias léxicas para resaltar el parentesco que surge de los diálogos de Valdés. Esta obra de la profesora Navarro Durán no disipa completamente las dudas, pero es un paso adelante en el adormecido panorama filológico español. Por último, notar que este breve ensayo (202 páginas) se lee como si tratara de una pesquisa policial lo que suma a la información erudita una amenidad que es de agradecer.

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